En toda la Diócesis de San Felipe, se vivió de manera significativa la Eucaristía de la Solidaridad en honor a San Alberto Hurtado, santo que marcó un camino de justicia social y servicio a los más desamparados. Cada comunidad parroquial y decanato se unieron en esta celebración, fortaleciendo el sentido de la solidaridad en el marco del mes de agosto, conocido en Chile como el “Mes de la Solidaridad” debido a la conmemoración del fallecimiento del Padre Alberto Hurtado el 18 de agosto.
Este año, dado que el 18 de agosto cayó en domingo, la Pastoral Social Diocesana promovió que cada parroquia viviera la solemnidad de San Alberto Hurtado con especial devoción, sin perder de vista la relevancia de la misa dominical. Además, se organizaron tres Eucaristías simbólicas en cada decanato: en el Decanato de San Felipe, la misa se celebró a las 11:00 hrs. en la Parroquia Sagrada Familia; en el Decanato de Los Andes, en la Parroquia La Asunción; y en el Decanato de Petorca, en la Parroquia Santo Domingo de La Ligua, esta última presidida por el Obispo Gonzalo Bravo Álvarez.
La Eucaristía en La Ligua, celebrada en conmemoración de los 72 años del fallecimiento de San Alberto Hurtado, contó con la presencia de numerosos fieles y voluntarios de la parroquia y la comuna, quienes recibieron una bendición especial. Durante la celebración, también se entregó la oración del Padre Nuestro a niños y niñas en formación para recibir el Sacramento de la Eucaristía. En su homilía, el Obispo Gonzalo destacó la importancia de abrir el corazón a Jesucristo, lo que nos invita a vivir en comunidad, pasando de una vida solitaria a una vida solidaria. “Si somos capaces de ver a Jesucristo en la Eucaristía, somos capaces de ver a Jesucristo en el pobre”, enfatizó.
En la Parroquia La Asunción de Los Andes, la Eucaristía fue presidida por Monseñor Giuseppe Silvestrini, Secretario de la Nunciatura Apostólica en Chile, y concelebrada por el párroco Omar Orellana. En esta misa participaron diferentes pastorales, incluyendo Cáritas Los Andes, que agradecieron las bendiciones recibidas para continuar su misión solidaria. Al finalizar, el Padre Omar agradeció la oportunidad de celebrar esta misa simbólica decanal en su comunidad, especialmente en el mes patronal de la Asunción.
Por su parte, en la Parroquia Sagrada Familia de San Felipe, la Eucaristía estuvo a cargo del párroco Pedro Vera, quien resaltó la vida y el ejemplo de San Alberto Hurtado como un modelo de entrega total en la búsqueda de Dios y en el servicio a los más necesitados.
Estas celebraciones marcaron un tiempo de reflexión y acción en la Diócesis de San Felipe, recordándonos que la solidaridad, inspirada por San Alberto Hurtado, sigue siendo un pilar fundamental en la vida cristiana y en la labor pastoral de nuestra Iglesia.
Fuente: Área de Comunicaciones de la Diócesis de San Felipe