El domingo 29 de diciembre, la Diócesis de San Felipe dio inicio al Año Jubilar 2025 con una Solemne Eucaristía celebrada en la Catedral de la ciudad. La ceremonia estuvo presidida por Mons. Gonzalo Bravo Álvarez, obispo diocesano, acompañado por el Vicario General, Pbro. Fabián Castro Marchant, además de presbíteros, diáconos, fieles de diversas comunidades y funcionarios del Obispado.
En su homilía, Mons. Gonzalo reflexionó sobre el significado de este tiempo jubilar, invitando a los presentes a redescubrir la esperanza en tres dimensiones:
- Encuentro personal con Cristo: “Este año será una invitación a abrir nuestro corazón al Señor en la oración, en los sacramentos y en la vida cotidiana”, expresó, destacando que Jesús es la “puerta” de la salvación (Jn 10,9).
- Fortalecimiento de la comunidad eclesial: Mons. Bravo animó a los fieles a vivir este Año Santo como Iglesia, reforzando la comunión y el apoyo mutuo como “peregrinos de esperanza”.
- Lectura de los signos de los tiempos: Invitó a transformar los sufrimientos y anhelos del mundo en signos de esperanza iluminados por el Evangelio.
Además, nuestro pastor diocesano, habló de la alegría que significa para la iglesia vivir este año de jubilo que coincidentemente es el mismo año del centenario: “La Alegría de la iglesia no consiste en su poder, la alegría de la iglesia no consiste en su presencia pública, la alegría de la iglesia no consiste en algún posicionamiento que tenga cultural, social, incluso pudiese ser de la caridad, la alegría de la iglesia es que cumplaños el mandamiento, y el mandamiento nos lo dice super bien, el que cumple su mandamiento permance en Dios, y Dios permance en él, ese es el mandamiento, y lo dice en la segunda lectura, “que creamos en el nombre del hijo de Jesucristo y nos amemos los unos a los otros….”
Centenario de la Diócesis: Un Tiempo de Gratitud y Reflexión
El obispo resaltó que este Jubileo coincide con el centenario de la diócesis, una oportunidad especial para dar gracias a Dios y reflexionar sobre el testimonio de esperanza que la Iglesia local ha brindado en estos 100 años. En este contexto, destacó la importancia de la Carta Pastoral “Con Ocasión de los 100 Años de Evangelización” como guía para este tiempo de gracia.
Compromisos Pastorales para el Año Jubilar
Mons. Gonzalo anunció tres acciones concretas que marcarán este año:
- Fortalecer la formación cristiana: Catequesis, celebraciones litúrgicas y formación espiritual serán pilares para renovar la fe y la esperanza.
- Promover la reconciliación y el perdón: Un llamado a sanar divisiones y construir comunidades más unidas.
- Salir al encuentro de los necesitados: Llevar esperanza a quienes viven en pobreza, soledad o buscan sentido en sus vidas.
Bajo la Protección de María, Madre de la Esperanza
El obispo concluyó su mensaje poniendo este Año Jubilar bajo la guía de María, Madre de la Esperanza, y animó a vivir este tiempo con gratitud y compromiso: “Que nuestra vida sea un testimonio vivo para el mundo, mostrando que la esperanza cristiana no defrauda porque está cimentada en el amor eterno de Dios”.
Con esta celebración, la Diócesis de San Felipe comienza un camino de reflexión, reconciliación y acción misionera, marcado por la alegría del centenario y el deseo de construir una Iglesia viva y llena de esperanza.